Tuve un Lucas en mi infancia y llevaba tiempo queriendo hacerme con uno en mi colección. Pero yo al mío lo recordaba muy guapo y en las fotos de los que veía no me parecían demasiado favorecidos, por eso nunca me decidía a adoptar ninguno.
Cuando hace unas semanas saltó la noticia de la reedición del pack Nancy-Lucas, me ilusioné pensando que por fin iba a tener mi ansiado amigo para mis chicas. Pero la reedición me defraudó completamente y no quise comprarla, ante esa desilusión volví a buscar uno como el que yo tuve.
Y mira por dónde, entonces, sin buscar demasiado, apareció este chico tan majo en buen estado y a un precio más que aceptable.
Llegó desarmado y con la cara y los brazos muy pálidos, pero yo le vi mucho potencial.
Después de un baño, una comida consistente y un sueño reparador recuperó el color de cara y la unidad de los miembros y quedó así de guapo:
Lleva sus pantalones y zapatos originales. Trae también una cazadora fina, pero yo he preferido hacerle un jersey calentito. Me gusta que los muñecos estén vestidos de acuerdo con la temporada, sé que no sienten frío ni calor, pero a mí me da la sensación de que sí.
Me parece precioso, estoy muy contenta con él, y no digamos las chicas, en una próxima entrada veremos cómo lo han recibido.