jueves, 21 de febrero de 2019

YO QUISE SER UNA GEISHA

Me había encaprichado de una Nancy Geisha de los 70 por eso de que hay pocas Nancys morenas y las setenteras son las que más me gustan. No me vale ni la Japón Quirón ni la Geisha de reedición. Pero después de ver los precios que alcanzan y que además no tiene raya en la melena y eso me parece un impedimento a la hora de peinarla, pensé en fabricarme yo una. Como tengo varias rubias de ojos color miel, decidí que una de esas sería apropiada, y al final la elegida fue esta belleza:


Pero al final me daba miedo teñirla de negro-negro, así que me decanté por un marrón oscuro. No me gustó la primera aplicación, quedó un tono ceniza no lo suficientemente oscuro. Tuve que someterla a dos sesiones de tinte. Aquí la niña en pleno proceso:


La segunda vez trabajé con la cabeza sin cuerpo pensando que la manipularía mejor, pero fue un error,  la sujetaba peor, se  me escurría, y al final se me movió el plástico con el que protegía la cara y se me mancharon los bordes.



Creí que me daba un patatús. Bueno, era la hora de probar el famoso Peroxiben.  Y  paciencia.




Y después de unos cuantos días en los que la mancha disminuyó pero no desapareció (queda pendiente de sucesivas sesiones de crema y flexo)  hemos decidido que ya puede presentar su nuevo look en sociedad. Geisha, geisha, no es... pero ha quedado muy bonita y con un tono de castaño que no tenía en la colección. 
Con este precioso diseño de Juanjo Oliva de color rosa destaca muy bien el tono oscuro de la melena. 













Yo la veo muy bonita, aunque el proceso me ha resultado más latoso de lo que pretendía.  Quizá me anime a convertir en pelirroja a una de mis Leslys rubias.

sábado, 16 de febrero de 2019

PLATERO Y LESLY

 Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos. Sólo los espejos de azabache de sus ojos son duros cual dos escarabajos de cristal negro. Lo dejo suelto y se va al prado y acaricia tibiamente, rozándolas apenas, las florecillas rosas, celestes y gualdas... Lo llamo dulcemente: ¿Platero?, y viene a mí con un trotecillo alegre, que parece que se ríe, en no sé qué cascabeleo ideal...



 Entre los niños, Platero es de juguete. ¡Con qué paciencia sufre sus locuras! ¡Cómo va despacito, deteniéndose, para que no se caigan! ¡Cómo los asusta iniciando, de pronto, un trote falso!...

 Lo llamo dulcemente: “Platero”… y viene a mi con trotecillo alegre que parece que se ríe…



Come cuanto le doy. Le gustan las naranjas mandarinas, las uvas moscateles, todas de ámbar, los higos morados, con su cristalina gotita de miel...
Es tierno y mimoso igual que un niño, que una niña...; pero fuerte y seco por dentro, como de piedra. Cuando paso sobre él, los domingos, por las últimas callejas del pueblo, los hombres del campo, vestidos de limpio y despaciosos, se quedan mirándolo.

Tiene acero. Acero y plata de luna, al mismo tiempo."
"Platero y yo" (fragmentos) Juan Ramón Jiménez



Mirari ha querido colaborar con este pequeño homenaje a una preciosa obra literaria que me encanta y me recuerda mis veranos rurales rodeada de los animalillos de los que no podía disfrutar el resto del año. 


Y ya de paso, os enseño las últimas chaquetas que he hecho para las peques de la casa. La consabida chaqueta con capucha que hago con pequeñas variaciones de todas las tallas y todos los colores y que de tanto hacerla me sale sola, y otra más sencillita. 




      ¡Cómo  les gusta estrenar a estas pilluelas!

lunes, 11 de febrero de 2019

NANCY CON MODELO "SARATOGA" DE FANNY

Ya sabéis que Nancy puede compartir modelos con alguna de sus coetáneas de otras marcas. Como hay tantas muñecas que intentaros hacerle la competencia en los años setenta, al final hay un montón de trajes propios y ajenos con los que vestirla. En el caso de Fanny de Vicma ya teníamos alguna prenda como vimos aquí y además había un vestido que me gustaba especialmente, el conjunto "Saratoga"



He visto algunos en Todocolección que estuve tentada de comprar, pero siempre eran demasiado caros. Al final, apareció uno muy baratito y en buen estado, sólo había que cambiarle el velcro, y a casa que se vino.



Es un modelo muy bonito, con tejido de punto finito, con mucha caída, el cuerpo ceñido con gomas y unos colores muy alegres. El toque original se lo da el foulard que lleva cosido a la pechera del vestido, y que yo le he enrollado al cuello, no sé si se lleva así o habrá otras opciones, en el catálogo lo lleva simplemente sobre los hombros.



Siempre que veo este vestido me parece que está hecho para ir de verbena. Caludia ha sido la valiente que ha querido enseñarlo pese al frío, y  bien guapa que está.














miércoles, 6 de febrero de 2019

ENTREVISTA 9- TABHITA "¡VIVA LA PEPA!"

Hola, hoy viene a visitarnos Tabhita, que es la responsable de uno de los blogs más bonitos que conozco.   ¡Viva la Pepa!

Es una pena que últimamente no lo actualice, pero aún así ha tenido la gentileza de participr en esta sección. a los que no la conzcáis, os invito a deleitaros con sus niñas siempre impecables, sus excepcionales trabajos de carpintería, sus diseños de moda, etc... hace de todo y todo espectacularmente bien. Vamos a conocerla mejor.


Hola  ¿puedes presentarte?

Hola. Soy Tabhita Twitchit. Obviamente tengo otro nombre, apellidos, dni, numero de la seguridad social y todas esas cosas de la vida real, pero me gusta más presentarme como Tabhita.  

¿Cuando y por qué empezaste tu colección?

Ni siquiera sé si mi familia de muñecas merece el calificativo de colección. Mis muñecas van llegando a mis manos de forma bastante anarquica y no poseo los conocimientos necesarios para considerarme una verdadera coleccionista. Un coleccionista autentico tiene una paciencia, una energía, y un afán de perfección de los que carezco completamente. Yo en cambio recojo todas las muñecas que caen en mis manos sin apenas discriminar y no me preocupo demasiado de su origen, singularidades y demás pormenores que hacen cada muñeca única. Confieso que los coleccionistas tienen todo mi respeto y admiración. Y tal vez también siento un poco de sana envidia por el tesón y entrega que le ponen a su pasión. 
Mi caso es más bien el de una modesta amontonadora de muñecas.

El comienzo de este frenesí amontonador seguramente se inició cuando aparecieron las primeras Nancys Quirón. Al verlas en un escaparate recordé los buenos momentos que viví y lo mucho que voló mi fantasía jugando con mi querida Nancy que por suerte escapó a las razzias de mi madre. Y bueno, que como os contaba al verlas de nuevo me volvieron a enamorar. Así fue como me compre una Nancy Centroeuropa, un Trouseau con el abrigo de visón y una Lesly Jeans de reedición. Ahora me arrepiento de haber dejado en la tienda las preciosas Quirón que tuve al alcance de la mano.
Mas tarde rescaté del trastero una Nenuca Corazón y alguna más que escapó a las susodichas razzias maternas. 
Mi interés por las muñecas se desató ya sin remedio al bucear por la red y empezar a leer blogs con verdadera avidez. Por cierto, muchos de los vuestros. 
Las Pepas fueron la gota que rebosó mi entusiasmo y desde entonces estoy perdida para los restos.




¿Cuantas muñecas tienes en tu colección? ¿Cual fue la primera?

Considero la primera de mi no-colección a mi Nancy de la infancia. 
Por lo demás he acumulado una cantidad más que respetable para el espacio y el tiempo de que dispongo.
De porcelana tengo más de un centenar, algunas muy bonitas y de cierto merito pero la inmensa mayoría son de chichinabo. Ya digo que no soy demasiado rigurosa.
Nancys tengo cincuenta de diferentes épocas. Son las niñas de mis ojos.
Leslys diecisiete, también de diferentes épocas. La mayoría han recalado en casa recientemente gracias a una persona muy generosa. Con ellas llegaron cinco Lucas bastante guapetes.
De la familia Famosa también tengo una Selene que da un poco de miedito.
Pepas tengo veintisiete en total, además de seis Toños, que con esos cuerpecillos tan mal fachaos seguro que los pobrines no se echan novia en la vida a pesar del ingente mujerío que los rodea.
La nuevas de Vidal Rojas también han encontrado un lugar en mi casa y tengo ocho Maris y seis Pepas.
Tengo una Mariquita Pérez grande de vinilo, dos pequeñas y otras dos más pequeñas todavía.
Una Alina y una minimuñeca Tin-tan son mis más rechiquitajas.
En el capitulo de los bebés tengo un nene diminuto de plástico duro de los años cincuenta. De Famosa tengo una Ondina de tamaño grande, un Bebé Querido ochentero, un Nenuco moderno, mi Nenuca Corazón y cuatro Barriguitas. También tengo a mi querido Luni de muñecas BB y un bebé de mercadillo cuya historia os contaré algún día para mi eterna vergüenza.
El año pasado cayeron en mis manos una Guendalina y una Pierina. Ya os las presentaré. De ese estilo también tengo la muñeca de "Las Meninas" marcada Edi que los que visitáis mi blog ya conocéis.
De Corolle tengo a mi Camille.
Cuatro Barbies y media docena de muñequitos de recuerdo completan el grueso de mi familia muñequil junto con algunas muñecas de las que no conozco el nombre.
Ah! se me olvidaban mi Swingy de ICSA y mi holandesita de Durpe.
Seguro que se me olvida alguna más.
En total son...casi prefiero con hacer el calculo. Y para empeorar la situación están por llegar seis Fannys de Vicma.














¿Dónde y cómo las guardas?

Esa es la gran pregunta. Casi mejor os contaría donde no las guardo. Están por cualquier lugar donde quede un hueco.
Buena parte de mis muchachitas están amontonadas en unos estantes-vitrina que pergeñé hace un tiempo, pero la mayoría andan metidas en armarios, vitrinas, cajas y cajones. De hecho tengo un armario de tres puertas, una cómoda y una mesilla de noche solo para ellas y sus trapitos. A parte de un armario empotrado que está atestado de muebles y demás cachivaches. 
Me encantaría tener una habitación solo para ellas y sus trastos con todo bien expuesto y listo para disfrutarlo. De momento y hasta que no me toque la lotería y cambie de casa andamos apretados como sardinas de lata.

¿Cómo vive tu familia tu afición?

Me temo que con amable condescendencia. Opinan que es raro que ande jugando con muñecas a estas edades, pero tengo que decir que a pesar de que consideran que estoy un poco chiflada mi padre y mi hermano me echan un cable siempre que necesito ayuda para alguna reparación y se interesan por las cositas que hago para mis niñas. 
Además ya saben que regalarme.

¿Qué tipo de muñeca prefieres? ¿Cual es tu favorita?

Me encantan las muñecas que representan a niñas o adolescentes. Muñecas sin complicaciones que se pueden bañar, peinar, vestir y desvestir con facilidad. Las muñecas de porcelana también me apasionan y hubo un tiempo en que fueron mis preferidas.
Mi favorita actualmente seguramente es Nancy. Es la primera muñeca con la que jugué y que realmente me gustó. Posteriormente he ido ampliando mis horizontes y me he ido interesando por otros estilos. Incluso me empiezan a gustar los bebés que siempre he detestado y alguna muñeca de esas que "hacen cosas" que tampoco me atraen demasiado.

¿Tienes muñecas personalizadas?

Alguna Pepa a la que he cambiado el maquillaje, los ojos y poco más. Unas cuantas Leslys con el pelo teñido. Si es que a eso se le puede llamar personalizar. Nada relevante me temo.




¿Personalizas tus muñecas?

No, realmente. Como comento más arriba no considero esos pequeños cambios como una verdadera personalización.

¿Cual es la última muñeca en llegar a tu colección?

Pues están por llegar en unos días unas Fannys, pero la última es una Nancy negrita de tobillo gordo. ¡Preciosa!

¿Cual te gustaría tener a continuación y por qué?

Me muero por una Blythe o cualquier clon medianamente decente.
¿El motivo? Para cacharrear con ella e intentar convertirla en una obra de arte como las que veo en algunos blogs. 
Es una muñeca de la que me enamoré en el acto sin saber lo que era ni como se llamaba cuando la vi en un anuncio de Babaria.

¿Te planteas un límite para tu colección?

Me pongo un limite cada hora de cada día, pero en cuanto me regalan una muñeca o tengo posibilidad de comprarla a un precio razonable me olvido del limite, de los buenos propósitos y de la abrumadora falta de espacio que padezco.

¿Qué es lo que más te gusta de coleccionar muñecas?

Para mi es un placer estético que me endulza la vida y me reconforta. Y sobre todo me retrotrae a tiempos más sencillos y felices. 
Cuando visto y acicalo a alguna de mis muñecas puedo sentir -aunque, ¡ay! no del todo- la misma alegría e ilusión que experimentaba al jugar con mi Nancy. A veces pienso en la felicidad que me hubiesen proporcionado mis actuales muñecas cuando era niña. O tal vez no. Creo sinceramente que la cantidad de muñecas que ahora poseo no me hubiesen hecho mucho más feliz de lo que fui en esa etapa de mi vida; tal vez momentáneamente hubiesen amplificado esa felicidad, pero no habrían cambiado su esencia. 
El factor indispensable para desplegar ese sentimiento era sin duda la inocencia, las esperanzas intactas, la sencilla alegría de ser una criatura amada por los suyos y libre de preocupaciones. Eso principalmente es lo que le dio un sabor inolvidable al acto de jugar con mi muñeca. Ya fuese ésta mi Nancy o cualquier otra no habría cambiado ni un ápice el sentimiento. Aún puedo degustar una brizna de ese sentimiento; una briza tan liviana y juguetona no se deja atrapar. 
En fin, son cosas de la nostalgia terminal que padezco.
Y bueno, también es un enorme placer compartir con otros forofos muñequiles está afición. Es uno de los mayores incentivos. Las cosas buenas compartidas son mejores siempre.

Y aqui lo dejo que ya he desvariado bastante.


Tabhita, muchas gracias por tu generosa entrevista, me ha encantado conocer cómo vives tu afición, y por favor, vuelve para enseñarnos todas esas maravillas que atesoras y aún no hemos visto ¿Gwendolina? ¿Pierina? ¿Fanny? ¿Lucas? ¿Nancy negrita de tobillo gordo? Pues esto es como un sortilegio, y después de haberlas nombrado tienes la obligación de enseñárnoslas ¡Vuelve!